Los fichajes centenarios se han convertido en lo habitual. El club blanco se ha movido rápido y bien con el inglés, pero ¿hasta cuándo llega el dinero y la historia para convencer a los futbolistas?
Dos en seis meses y no bastan.La historia y las cosas bien hechas pesan, pero ¿hasta cuándo?En diciembre fue Endrick el que firmó por el Real Madrid. Esta semana ha sido Jude Bellingham. El primero a cambio de 60 millones de euros con 16 años y el segundo con103 millones de euroscomo argumento y con tan solo 19 años en su documento de identidad. El problema es que eso de pagar tales cantidades de dinero ya es tendencia, que lo que se pensaba que la pandemia iba a traer en cuanto a moderación en el gasto, tan solo duró un año y la realidad es otra.
El Real Madrid ha logrado el fichaje codiciado, empezando por el trabajo bien hecho, por aplicar la lógica en el pasado reciente y por aquello de que el futbolista es capaz de dejar en segundo ρłɑɴo el dinero que le ofrecen otros. La duda es hasta cuándo será posible mantenerlo.En Valdebebas apuntan que el de Bellingham puede ser el último milagro.Las balas se agotan y el umbral de estos fichajes se coloca en lo imposible.Y hablamos de un equipo que genera mucho dinero cada temporaday que no se ha empeñado hasta las trancas. No como otros.
La entidad madridista debe afrontar elfichaje de un delantero centrode rendimiento inmediato,con urgencia y con Mbappé y Haaland a manera de fantasmasiempre presente pero nunca reales. Al aficionado le da igual eso de tener que gastarse otros cien millones de euros como poco, como tampoco haber fichado uno (Endrick) en el pasado mes de enero para incorporarse en 2024. Cada día que pasa su cotización subía y las ofertas de otros, también. Para muchos eso es lo de menos.Hay que competir y eso pasa por fichar sin importar las consecuencias, al menos para los seguidores,no así para los dirigentes del Real Madrid. La pregunta es clara ¿habrá un nuevo milagro?
Florentino Pérez y José Ángel Sánchezsaben que necesitan algo más (acuerdos comerciales al margen), de ahí la apuesta por la cantera (doce títulos esta temporada) y por fichar talento más joven todavía. No hay otra, pero la exigencia es máxima. Mientras eso llega hay que iralimentando la fiera con fichajes de cien millones y sueldos de más de 30 millones, algo imposible de mantener por más tiempo.
El panorama del fútbol ha cambiado. LaLiga ha perdido músculo con respecto a la Premier (hasta siete equipos compiten con mayor capacidad de resursos que el club blanco) y la salva la tradición y el trabajo de algunos equipos. Además, ha aparecido el componente árabe, que de momento está siendo el refugio dorado de los veteranos, pero que ya va a empezar a ‘atacar’ a futbolistas jóvenes.”Quiero tener en Arabia a los 300 mejores jugadores”, ha pedido el príncipe Mohamed Bin Salmán. Tiembla Europa.